Reseña: FANGIRL - Rainbow Rowell

  A Cath no se le da bien la vida en general, pero hay algo en lo que es realmente buena: Cath lee fanfiction desde que tiene 12 años y se ha hecho bastante famosa dentro de este particular universo. Pero ahora empieza la universidad, y eso es una historia muy diferente... Su compañera de habitación es una borde, su hermana gemela la ignora totalmente, su padre es un desastre... Cath intenta estar a la última e integrarse, pero en el fondo solo quiere encerrarse en su cuarto a escribir. ¿Está Cath preparada para vivir su vida, escribir su propia historia y abrir su corazón? ¿O se quedará atrapada en su particular mundo de ficción?

  Había escuchado y leído cosas muy buenas de Rainbow Rowell desde que se publicó su primera novela Eleanor & Park, así que tenía ganas de leer algo suyo pero al final nunca me animaba. Después salió Fangirl, que me llamó mucho la atención por su sinopsis y por su preciosa portada, y todo el mundo hablaba taaaan bien de él que estuve a punto de comprarlo en inglés. Justo entonces me enteré que iban a traerlo a España así que esperé con ansias su publicación y lo compré la misma semana de que saliera. Al final tuve que retrasar su lectura por tema de exámenes y demás y eso sólo contribuyó a que mis ganas de leerlo y mis expectativas fueran aumentando de forma exponencial, lo que probablemente hiciera que el libro no fuera todo lo que yo esperaba. Aun así, ha sido una lectura estupenda.

  El libro está narrado desde la perspectiva de Cath, una chica de 18 años muy introvertida que hasta ahora ha compartido cada cosa de su vida con su hermana gemela Wren, incluida su pasión por Simon Snow, una saga de libros y películas ambientadas en un mundo mágico. Cath adora esos libros, tanto que dedica la mayor parte de su tiempo a escribir fanfiction sobre sus dos personajes favoritos: Simon y Baz, una afición que solía compartir con su hermana. Pero llega el momento de ir a la universidad, y Wren decide que es hora de dejar de estar juntas todo el tiempo y hacer su vida por separado, empezando por no compartir cuarto. Cath tendrá entonces que enfrentarse sola a esta nueva etapa que tanto la aterroriza. Ahora tendrá que enfrentar la vida en lugar de verla pasar y adaptarse a los cambios que la esperan. Esto, por supuesto, no será nada fácil para ella. Se alimenta a base de barritas de cereales en su cuarto por no tener que ir a la cafetería de la universidad, llena de gente que no conoce. Su compañera de cuarto la odia y encima tiene que aguantar a un chico delgado y larguirucho que siempre está con ella. Por si eso fuera poco, Wren se aleja cada vez más de ella, tiene una nueva mejor amiga y se la pasa de fiesta en fiesta y metiéndose en líos de los que Cath se ve obligada a sacarla.

  Cath es una chica extremadamente introvertida e insegura, con miedo a enfrentarse a la vida real. Nunca se le ha dado bien relacionarse con la gente más allá de su ordenador, siempre ha preferido los amigos literarios y pasar su tiempo libro leyendo o escribiendo fanfic en lugar de salir. Yo personalmente me he visto muy reflejada en Cath y probablemente por eso me haya gustado tanto este libro. Wren, por el contrario, es un personaje que no he aguantado porque durante la mayor parte del libro actúa de forma inmadura, irresponsable y egoísta. Reagan es la compañera de cuarto de Cath, alocada, extrovertida, directa y un poco borde. Es el polo opuesto de Cath y por eso se complementan tan bien y creo que demuestra ser muy buena amiga para Cath. Y luego está Levi, alegre, bueno, atento, humilde, encantador, gracioso y alguien con quien siempre podrías contar. Es imposible no enamorarte de él desde sus primeras apariciones. También me ha gustado la importancia que tiene en la vida de Cath su padre y cómo lleva este el hecho de separarse a la vez de sus hijas de las que depende tanto.

  Algo que me ha gustado especialmente es la historia de amor. En el género juvenil es bastante frecuente que las relaciones sean insta-love, algo que yo odio. Pero en este libro es todo lo contrario. Vemos crecer la relación poco a poco, vemos cómo van surgiendo los sentimientos entre los personajes según se van conociendo más. Además, se trata de una relación muy tierna sin llegar en ningún momento a resultar empalagosa.

  Aparte de la trama principal centrada en Cath, al final de cada capítulo encontramos fragmentos de las historias de Simon Snow, tanto de los libros como de los fanfics que Cath ha ido escribiendo. Simon es un joven mago que tiene que salvar el mundo de un ser malvado que trata de destruirlo (básicamente es una versión de Harry Potter). Baz en realidad es enemigo de Simon (vendría a ser Draco) pero en los fanfics que escribe Cath se enamoran. Al principio no tenía ningún problema con estos fragmentos pero según iba avanzando la trama principal quería saber más sobre ella así que encontrarme estas partes me molestaba un poco ya que no creo que aporten nada a la línea principal.

  El estilo de Rainbow Rowell no me ha defraudado. La autora es capaz de coger unos ingredientes sencillos e incluso un pelín tópicos y crear con ellos una historia única y especial. Para mí uno de los puntos fuertes de Fangirl es que Rainbow Rowell crea una historia muy real, que podría pasarle a cualquiera, y unos personajes muy cercanos con los que es muy fácil sentirse identificado. Además, no trata simplemente los temas habituales de la literatura juvenil como el amor, la amistad y los problemas familiares, sino que también ahonda en otros menos tratados como el alcoholismo y los trastornos psicológicos.

  En definitiva, Fangirl es una historia muy cercana sobre el crecimiento personal, madurar y encontrar tu lugar en el mundo. Una lectura fresca y divertida donde encontrarás amor, amistad, un romance precioso y, sobre todo, unos personajes geniales, todo ello hilado con una prosa magnífica.